miércoles, 31 de agosto de 2022

Regresar a la memoria

 Sigo soñando, sigo escribiendo sin tinta, sigo necesitando el espacio en que me encuentro, donde la coma, el punto y los signos de interrogación me hacer volar hacia mis mundos de fantasía. 

viernes, 29 de enero de 2021

Besos (Gabriela Mistral)

Hay besos que pronuncian por sí solos 

la sentencia de amor condenatoria, 

hay besos que se dan con la mirada 

hay besos que se dan con la memoria. 

Hay besos silenciosos, besos nobles 
hay besos enigmáticos, sinceros 
hay besos que se dan sólo las almas 
hay besos por prohibidos, verdaderos. 

Hay besos que calcinan y que hieren, 
hay besos que arrebatan los sentidos, 
hay besos misteriosos que han dejado 
mil sueños errantes y perdidos. 

Hay besos problemáticos que encierran 
una clave que nadie ha descifrado, 
hay besos que engendran la tragedia 
cuantas rosas en broche han deshojado. 

Hay besos perfumados, besos tibios 
que palpitan en íntimos anhelos, 
hay besos que en los labios dejan huellas 
como un campo de sol entre dos hielos. 

Hay besos que parecen azucenas 
por sublimes, ingenuos y por puros, 
hay besos traicioneros y cobardes, 
hay besos maldecidos y perjuros. 

Judas besa a Jesús y deja impresa 
en su rostro de Dios, la felonía, 
mientras la Magdalena con sus besos 
fortifica piadosa su agonía. 

Desde entonces en los besos palpita 
el amor, la traición y los dolores, 
en las bodas humanas se parecen 
a la brisa que juega con las flores. 

Hay besos que producen desvaríos 
de amorosa pasión ardiente y loca, 
tú los conoces bien son besos míos 
inventados por mí, para tu boca. 

Besos de llama que en rastro impreso 
llevan los surcos de un amor vedado, 
besos de tempestad, salvajes besos 
que solo nuestros labios han probado. 

¿Te acuerdas del primero...? Indefinible; 
cubrió tu faz de cárdenos sonrojos 
y en los espasmos de emoción terrible, 
llenáronse de lágrimas tus ojos. 

¿Te acuerdas que una tarde en loco exceso 
te vi celoso imaginando agravios, 
te suspendí en mis brazos... vibró un beso, 
y qué viste después...? Sangre en mis labios. 

Yo te enseñé a besar: los besos fríos 
son de impasible corazón de roca, 
yo te enseñé a besar con besos míos 
inventados por mí, para tu boca.

sábado, 23 de enero de 2021

Enamorarse (Mario Benedetti)

Cuando uno se enamora las cuadrillas
del tiempo hacen escala en el olvido
la desdicha se llena de milagros
el miedo se convierte en osadía
y la muerte no sale de su cueva
enamorarse es un presagio gratis
una ventana abierta al árbol nuevo
una proeza de los sentimientos
una bonanza casi insoportable
y un ejercicio contra el infortunio
por el contrario desenamorarse
es ver el cuerpo como es y no
como la otra mirada lo inventaba
es regresar más pobre al viejo enigma
y dar con la tristeza en el espejo.

domingo, 27 de diciembre de 2020

El moderno zombie

El estudio presentado ante la mesa directiva de GootZomb era técnicamente inviablepero altamente rentable para un proyecto de tal magnitud. Tratar de usar zombies para acelerar la urbanización de las colonias espaciales requería los más estrictos estándares de seguridad. El presidente de la compañía aún no olvidaba el desastre provocado en la instalación marciana RedZomb. La mano de obra zombie no era un problema, había en abundancia, a pesar de los reclamos de las sociedades civiles para garantizarles un mínimo de derechos laborales y humanos, y su costo de conservación, alimentación y alojamiento eran ridículamente bajos, además era mano de obra desechablesEl dilema radicaba en los protocolos de contención, debido a los eventos recientesdebido a que se registró agresividad poco habitual por parte de los zombies en los viajes espaciales. Aun no habían determinado las causas, pues los zombies viajaban fuertemente sedados. Terminaron por atribuirlo a la ansiedad y desorientación por el encierro prolongado, no aceptaron las fallas reportadas por el mal diseño de las capsulas espaciales y la posible contaminación por la entrada de partículas gamma. Pero a pesar de los riesgos, el nuevo documento resaltaba su utilidad para las nuevas campañas forestales, pues eran inmunes yaltamente resistentes a la toxicidad de microrganismosalienígenos.

 

El nuevo planeta GreenZomb poseía un ecosistema repleto de bosques llenos de gigantes abedules,saucesrobles, pinos y cedros. Era una enorme reserva de madera para la construcción de casas tipo californiano, la nueva moda, en los suburbios de las clases altas en diversos sistemas planetarios. Pero habían fracasado los primeros grupos de taladorespara hacerse de estos recursos, pues el ecosistema del planeta se auto protegió con una toxina que dejaba a los hombres en estado catatónico, lo que imposibilitaba la explotación acelerada en el planeta. Lo más irónico era que los zombies, cuando no estaban activos, entraban en el mismo estado catatónico o algo muy parecido a los síntomas que presentaban los trabajadores de GreenZomb, así que realizaron pruebas con una mezcla controlada de drogas experimentales y lograron activar algunas regiones neuronales del cerebro del zombie, para que realizara el desmonte con ayuda de maquinas especiales.

 

—Conocemos los riesgos del proyecto, en caso de fallar solo dejaríamos atrás un mar de escoria en descomposición—, sentenció el presidente corporativo de GootZomb

 

Era una vista impresionante la enviada por los zondas espaciales, apenas habían arrasado con el 5% de los bosques del planeta GreenZomb y ya tenían cubierta la demanda de cientos de planetas habitables. Los zombies trabajan turnos de 24 horas sin descanso, solo necesitaban minutos para alimentarlos con una base proteínica de cerebros sintéticos enlatados en cráneos igualmente sintéticos. Las nuevas drogas contribuyeron a su rápida asimilación al trabajo rutinarioPero muestras científicas registraron altos niveles de nuevos microorganismos, claro, que fueron rápidamente ocultados y sellados. Tampoco alertaron cuando se presentaron síntomas de agresividad extrema, éstos fueron exterminados inmediatamente y arrojados a cielo abierto, contraviniendo las medidas sanitarias del reglamento de contención de riesgos, en cual indicaba, en letras rojas, que el espécimen debía ser incinerado para evitar posibles brotes de contagiopor contaminación. Mientras cumplieran con las metas de produccióny estuvieran repartiendo dinero a manos llenasno tendrían a ninguna autoridad vigilando las zonas de trabajo.

 

Estaban tan satisfechos por la abundante producción, que nunca se dieron cuenta de la masa semilíquida y espesa brotando de las improvisadas tumbas, ni de suaspecto amarillento parecido al vómito. Eran miles de células trabajando en armonía bajo la superficie, mutando y adaptándoseTampoco repararon en el aire enrarecido. Involuntariamente eran responsables de la creación de un nuevo agente alienígena. Un nuevo parásito estaba evolucionando en el ecosistema que estaban deforestando.

 

—¡Celebremossobrepasamos la producción maderera, con tan solo el 15% de los recursos del planeta y ya inundamos toda la galaxia con nuestros productos! ¡Celebremos!—, gritaron los directivos del consejo de administración de GootZomb.

 

La familia Bisson había adquirido un pequeño oasis en el planeta NebuZomb en el sistema solar Guillon, tenían agua en abundancia, varias hectáreas para el cultivo y un clima agradable durante todo el año, incluso, lograban las mejoras cosechas después de la temporada de lluvias, pues enriquecía la tierras de cultivo con los mejores nutrientes. El tamaño era un poco menor al de la tierra, pero con una población menor a los cien millones de habitantes. Un verdadero paraíso. Los diez hijos de la familia solían tomar clases a distancia en circuitos cerrados de televisión, todos recibían los mismos conocimientos de robótica, pues la mano de obra era proporcionada por androides, así que las asignaturas de mecánica y programación de robots eran obligatorias. La sinapsis neuronal de los androides era altamente eficiente, debido a los compuestos orgánicos del cerebro y a las nuevas tecnologías que estaban desarrollando las universidadeslo que les ahorraba líneas de código para los nuevos modelos, pues habían logrado simular el comportamiento de las neuronas del cerebro.También las mejoras orgánicas como la piel, músculos y articulaciones, eran una realidad. El movimiento lo proporcionaban cuarenta motores distribuidos en el cuerpo, además de los sorprendentes adelantos en la nanotecnología. Solo les faltaba sentir, sangrar y verter lagrimas como los humanos. Nunca quisieron arriesgarse comprando mano de obra zombie, les daban miedo y en muchas ocasiones fueronprotagonistas de cuentos y pesadillas para los niños.

 

—¡Consuma los servicios y productos de GootZomb! ¡No se arrepentirán por su compra! ¡Millones de sistemas solares avalan nuestro trabajo!

 

Su casa estaba hecha en su totalidad con maderas de GreenZomb, no había mueble, utensilio y juguete que no tuviera una parte hecha en las industrias GootZomb.

 

En el año del apocalipsis universallas lluvias duraron más de lo normal, casi ocho meses viviendo con la persistente agua, y lo que nadie notó fue que en todos los planetas colonizados se presentaba el mismo problema pluvial o por lo menos no fue relacionadocomo un fenómeno atípico. Cuando llegaron a los doce meses la atmosfera se había descontrolado, enormes cúmulos de agua llegaron con mayor frecuencia a las ciudades, de pequeñas borrascas pasaron a tormentas huracanadas. La familia Bissontuvo que moverse a la planta alta de su casa. Los androides hacían hasta lo imposible para mantener las pocas cosechas a salvo, aunque ya estaba la mayor parte perdida, todo estaba anegado y los niveles de los ríos sobrepasados. Por ese motivo nunca notaron la masa gelatinosa que se estaba formando entre el agua y la tierra. Era la misma masa semilíquida y espesa que se había adherido a los productos madereros del planeta GreenZomb.

 

¿Qué esta pasando? ¿Deben reanudar el trabajo en los aserraderos? Un poco de agua no debe de detenernos. ¿Qué no se puede trabajar en estas condiciones? ¿Qué esta sucediendo con los zombies? ¿Se niegan a trabajar?

 

Un día terminó de llover, salió un esplendoroso y radiante sol, fue entonces cuando la hecatombe dio inicio. La bacteria alienígena había terminado de mutary adaptarse. Todos los androides detuvieron sus actividades. Centenas quedaron varados a mitad de los campos, sentados en los tractores y camiones de carga, los menos se paralizaron dentro de las casas mientras servían el desayuno. Algo estaba sucediendo en las redes neuronales de los androides, la programación descarrilo en un gran caos. Las tres leyes de la robótica se corrompieron en una sola instrucción y una vez implantada se ejecutó con extrema violencia

 

Los primeros androides-zombie se abalanzaron como maquinas trituradoras sobre la población humana. Los pocos humanos que lograron escapar con el tiempo se transformaron en zombies, pues el consumo de agua y alimentos contaminados los hicieron vulnerables al nuevo huésped. Entonces empezó una batalla entre dos especies mutantes. El desenlace era claro, de antemano tenían la batalla perdida. Los humano-zombie eran solo una masa de carne, huesos y articulaciones, que no tuvo la menor oportunidadcontra los androide-zombie que estaba compuesta por una masa de titanio, acero y la fuerza de cuarenta motores desbocados con el poder de una batería atómica.

Tiempo después…

 

El planeta GreenZomb lucía verde con la totalidad de sus bosques cubriéndolo a lo largo y ancho del territorio. Nunca había estado tan pacifico. La flora y la fauna vivían felices en su edén. No quedaban rastros de humanos, zombies o androide-zombie. La maquinaria terminó como maceta para maleza y árboles. El ciclo natural del planeta se había restablecido. Esas fueron las fotografías que las zondas espaciales estuvieron enviando cada año a un solitario y vacío centro de control.

jueves, 17 de diciembre de 2020

El repique de la campana

Cada campana repica dentro de mi cabeza como un lejano susurro hasta convertirse en un hipnótico sonido, el cual terminara con el eco de la última campanada. Un año agoniza igual que las temibles crecidas de la época de lluvia, para convertirse de nuevo en una mansa corriente, donde se puede navegar con las manos haciendo surcos en el agua, sin la preocupación de utilizar un par de remos. Con la misma ansia de un niño, buscador de oro, exploraremos las orillas de las islas desiertas. Algunas veces con las uñas escarbaremos en playas de arenas blancas; otras en arenas grises, llenas de filosos guijarros, hasta desangrarnos. No hay recompensas fáciles ni mucho menos las encontraremos flotando a la deriva. Tendremos que bucear en aguas profundas sin tanque de oxígeno. Posiblemente, nos ahogaremos en esteros pantanosos y con toda seguridad alguien nos salvará. También llegará la época en que tengamos que remar y lo haremos contra corriente o bajo fuertes tempestades. No hay seguridad en nada pero llegaremos sanos y salvos a nuestro lugar de remanso, porque la vida es un ciclo que inicia y termina con el repique de las campanas.

martes, 25 de junio de 2019

Blanco

Endulcemos el horror del mundo con un poco de azúcar, pensemos en la inmaculada belleza del blanco y no en la fealdad recalcitrante de los colores. Dejemos que la inocencia nos conduzca como si fuéramos niños caminando por impolutas y blanquísimas playas. Convirtamos las sombrías mentiras en luminosas verdades, aquellas que deslumbran el entendimiento y desafían la razón. Movámonos, dejemos la apatía y adelantémonos al proscenio de nuestras sosas vidas. Imaginemos por un momento que nos curamos de una vieja dolencia y florece de nuevo nuestra inocencia. ¿Seriamos capaces de despojarnos de la hostilidad del hombre? ¿Llenaríamos de altares y danzas este soterrado planeta? Seamos atrevidos y atrapemos blancas y luminosas estrellas, solo aquellas que navegan entre nubes, como si fueran azahares de novia. Dejemos de pensar en oscuras ceremonias, ¿o no están cansados de arrastrarse gozosamente en la inmundicia? ¿No les gustaría volar entre una cristalina bandada de aves blancas? 

La eternidad de la despedida

Por un segundo olvidé que fuimos parte de un cuento antiguo, no lo puedo negar, fui sencillamente feliz contigo a mi lado, viviendo ahogado en la dulce complicidad y la grata compañía de tus palabras. Fuimos escribiendo bellos momentos con amables conversaciones, pues los llenamos con una indeleble prosa de promesas. ¡Fuimos dos locos construyendo dulces e imprecisas realidades! ¡Llenando de dulzura el horror del mundo! ¿De que otra manera hubiese quedado enredado entre tus brazos por minutos, días, meses, años? ¡Solamente con luminosa locura! Nuestras separaciones fueron tan cortas como el espacio dejado entre nuestros labios. Entiendo de la eternidad al no intentar mirarte, quedándome hipnotizado en la suavidad de tus dedos, en el aroma de tu espigado cuerpo y en las risueñas e insondables curvas de tus senos. Aunque extrañé el tibio calor de tu cuerpo, no existe la mínima posibilidad de un mañana, ni de los proyectos que puse en tus manos, ni los sueños que tú confiaste a mi inestable razón. ¿Dime si me miento como siempre? Me engaño como si pudiera cortar los hilos oscuros que nos tienen unidos. Pero sentirte cerca fue mucho más de un deseo delicioso. Confiemos en el mañana, me dices con la ternura de una madre, pues el ocaso será breve, pero doloroso para un corazón todavía inflamado. Dejemos que poco a poco languidezca la flama, sin prisa, hasta que se consuma el último leño. ¿Cómo si eso fuera posible? Posiblemente, después de muchos años, ya no habrán formas ni contornos que nos hagan daño. Pero hoy necesito que me arropes como a un niño, para tener idénticos recuerdos antes de que se conviertan en sombras. Ayúdame a olvidar y a morir lentamente sin ti.